La gestión de la humedad en el ambiente interior de las edificaciones es una de las claves de su calidad. Los revestimientos de arcilla son un gran aliado para conseguir esta capacidad, tanto en el que se refiere a la difusión del vapor de agua como a la absorción de la humedad ambiental.
Ligadas a estas propiedades, los revestimientos de arcilla proporcionan otras características que los hacen muy apreciados en bioconstrucción
La arcilla y la regulación de la humedad
La arcilla, debido a su configuración morfológica, es capaz de retener y liberar gran cantidad de agua en fase líquida.
Experimentos de la Universidad de Kassel, en Alemania, demostraron que un revestimiento de 15 mm de arcilla podía absorber 5 veces más de humedad que un revestimiento de una placa de cartón-yeso.
Esta capacidad de absorber la humedad varía significativamente para cada tipo de fábrica, en función de la proporción de arcilla incorporada, como puede deducirse de este gráfico.
Es conocido el hecho de que la variación de la humedad relativa en interiores puede ser regulada usando materiales porosos e higroscópicos. Hacerlo mediante revestimientos con alta permeabilidad al vapor de agua asegura la ausencia de secuelas negativas para la calidad del ambiente interior.
Un revestimiento de arcilla de 20 mm regula sustancialmente los flujos diarios de humedad relativa causados por la ventilación y actividad humana en el interior de un espacio.
Otras ventajas de los revestimientos de arcilla
Los revestimientos de arcilla regulan la humedad relativa interior, manteniéndola entre el 40% y el 70%.
Esta humedad, además de ser óptima desde el punto de vista de la transpiración humana, permite que la probabilidad de supervivencia de las bacterias y virus transportados por el aire se reduzca considerablemente.
Mantener la humedad relativa en torno al 50% también evita que productos químicos incorporados a algunos materiales de construcción, como el formaldehído en el caso de muchos barnices y adhesivos, reaccionen con el vapor de agua y se liberen al ambiente.
También el riesgo de condensaciones se minimiza con la presencia de materiales higroscópicos. La proliferación de mohos y sus esporas, algunas potentes neurotóxicos, es un riesgo biológico asociado a este tipo de humedad.
El siguiente gráfico muestra la relación entre la aparición de moho y la humedad relativa.
También se ha encontrado evidencia de que el uso de arcilla como revestimiento neutralizar los olores en las estancias, debido igualmente a sus característica estructura morfológica.
¿Quién es Oriol Balliu y cómo podemos acceder a conocer su trabajo?
Oriol es educador ambiental de formación. En 1997 fundó Rocamare, una empresa de bioconstrucción especializada en el uso de la tierra como principal material de construcción
En Rocamare trabajan para revalorizar la tierra como material de construcción, tanto en obra nueva como en rehabilitación. Ofrecen servicios de asistencia a la autoconstrucción, asesoría y talleres de formación.
A partir del año 2000 se interesa para la autoconstrucción ecológica y participa en talleres y formaciones en técnicas de tierra, cal y bambú.
A partir de 2012, Oriol integra dentro de la oferta formativa de Rocamare la formación y el asesoramiento en construcción con tierra, compaginando la actividad docente con la construcción de varias obras en tierra cruda, incluyendo trabajos en interiorismo.
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